El mandatario estatal, Ricardo Gallardo Cardona, afirmó que la administración anterior heredó alrededor de 20 mil millones de pesos en pasivos “bajo el tapete”, que no se plasmaron en la cuenta pública y que desestabilizaron las finanzas, razón por la que su gobierno ha tenido que recurrir a la contratación de créditos quirografarios, que se han pagado oportunamente.
Propuso que varios exgobernadores sean llamados a cuentas para que expliquen cómo fueron utilizados los recursos, entre ellos los que forman parte del pasivo público.
Precisó que solo por El Realito y por la deuda del gobierno con Pensiones del Estado, el pasivo asciende a más de 9 mil millones de pesos.
MALAS DECISIONES
En la recta final del sexenio pasado, para tratar de cubrir el déficit por la reconversión del sistema hospitalario, adquisición de insumos -aportados por la Federación-, y contratación de personal para enfrentar la pandemia; es que trataron de incrementar un préstamo bancario a largo plazo, el monto de la deuda pública o vender el terreno propiedad estatal, con la finalidad de destinar recursos a subsanar las finanzas.
Gallardo Cardona afirmó que, además de los 20 mil millones de pesos, también recibieron finanzas estatales deficitarias, las cuales han tratado de subsanarse en la presente administración
“Disfrazaron la deuda real del estado, eran cifras maquilladas, lo que reportaban era la de largo plazo con instituciones bancarias, pero ocultaron todo lo demás, entre ellos, los créditos quirografarios. No eran una realidad esas cifras”, manifestó.
Explicó que el exgobernador Juan Manuel Carreras, no logró que la Federación le reconociera el gasto realizado, para atención de la crisis sanitaria.
CUENTAS ILUSORIAS
Otro de los planteamientos que hizo la administración anterior en mayo de 2020, era tramitar un crédito por 700 millones de pesos, bajo el argumento que había disminuido el monto de la deuda pública bancaria, sin embargo, ese se reduce cada año en forma automática, porque se programan aportaciones al capital, al servicio de deuda y accesorios bancarios.
Explicó que la contratación de mil 500 millones de pesos, en formato quirografario a finales del año pasado, quedaron transparentados para atender el déficit heredado, oxigenar finanzas y, además, queda liquidado dentro del ejercicio fiscal de 2023.
“Ellos, en cambio, nos dejaron 20 mil millones de pesos en pasivos, bajo el tapete, nunca los plasmaron en la Cuenta Pública”, comentó.
Agregó que “el deudo con Pensiones del Estado es de 4 mil millones de pesos; por la presa El Realito, ahora con problemas, otros 5 mil MDP, ahí ya son 9 mil MDP”.